Un estudio que nos obliga a decidir, otra vez
11 bit studios no es ajeno a los dilemas morales. Con This War of Mine y Frostpunk, el estudio polaco nos ha hecho tomar decisiones brutales, cuestionando nuestra ética bajo presión. Con The Alters, su más reciente propuesta, el conflicto ya no es externo: ahora se trata de ti mismo. O mejor dicho, de tus múltiples versiones.
En este juego de supervivencia con tintes de gestión estratégica, encarnas a Jan Dolski, un trabajador solitario que despierta en las costas de un planeta oscuro y hostil. Su única esperanza de regresar a casa radica en una enorme base móvil y en la creación de “alters”, clones con habilidades y personalidades distintas, creados a partir de sus propios recuerdos y manipulaciones genéticas.
Aquí su tráiler de lanzamiento.
Sobrevivir en un entorno donde el tiempo es el enemigo
La mecánica base de The Alters gira en torno al tiempo. Cada tarea —cocinar, minar, reparar, investigar— toma horas, y cada amanecer representa una amenaza letal de radiación. Esto convierte cada día en un rompecabezas: ¿Qué tarea priorizar? ¿Qué alter enviar a hacerla? ¿Cuál es el riesgo de fallar?
Para progresar, Jan debe recolectar recursos: metales, minerales y orgánicos. Pero hacerlo solo no es viable. Aquí es donde los alters entran en juego. Utilizando un recurso especial llamado “rapidium”, junto con una copia digital de sus memorias, Jan puede crear clones especializados que lo ayuden.
Estos alters no son simples NPC. Son reflejos de decisiones pasadas, de caminos no tomados en su vida. Un alter puede ser un científico brillante que Jan nunca fue, o un técnico hábil que tomó decisiones más arriesgadas. Esto no solo afecta el gameplay, sino que introduce una dimensión filosófica y emocional única en el género.
Gestión emocional y laboral: Un delicado equilibrio
Cada alter tiene una especialización y una personalidad distinta. Un científico alter puede realizar investigaciones vitales, mientras que un técnico construye y repara módulos rápidamente. Pero también tienen estados de ánimo, dudas existenciales y opiniones sobre el mismo Jan. No todos aceptan su rol sin resistencia.
De hecho, el juego plantea dilemas constantes: ¿cómo motivas a un alter que sabe que su existencia es temporal? ¿Cómo mantienes la moral del equipo cuando todos se parecen a ti pero piensan distinto? A veces, un alter exigirá respuestas: “¿En qué momento decidiste convertirte en alguien tan débil?”.
Las decisiones emocionales también afectan la productividad. Si forzas a un alter a trabajar en turnos largos sin descanso, su ánimo baja, su eficiencia disminuye y puede negarse a colaborar. Esto agrega una capa de complejidad que va más allá de la simple gestión de recursos.
Narrativa poderosa y actuaciones convincentes
Uno de los grandes logros del juego es su profunda narrativa emocional. Las conversaciones entre Jan y sus alters son el corazón de la experiencia. Todas las versiones están interpretadas por el mismo actor de voz, lo que resalta la idea de que son fragmentos de una misma persona. La actuación logra equilibrar momentos de vulnerabilidad, humor y confrontación de manera eficaz.
Aunque gran parte de la narrativa se presenta mediante escenas estáticas, el diálogo y la construcción de personajes mantienen el interés. Cada alter aporta una perspectiva única sobre la vida de Jan, revelando detalles sobre su pasado, sus fracasos y sus sueños olvidados.
Exploración y sistemas que rompen el ritmo
Sin embargo, The Alters no está exento de fallos. La exploración en la superficie del planeta puede volverse frustrante. Debes ubicar depósitos para establecer nuevas estaciones mineras, pero hacerlo requiere pasar por minijuegos poco intuitivos y desplazamientos constantes.
Además, la batería del traje espacial limita severamente cuánto puedes explorar antes de tener que regresar a recargar. Esto convierte lo que debería ser un momento de descubrimiento en un proceso tedioso y restrictivo.
El juego también incluye enemigos que pueden ralentizar el tiempo, envenenarte con radiación o simplemente hacerte perder un día completo con un solo golpe. Si bien esto añade tensión, a veces se siente como un castigo injusto más que un reto real.
Decisiones que pesan incluso días después
Otra mecánica interesante (y potencialmente frustrante) es que las decisiones mal tomadas en días anteriores pueden arruinar tus planes más adelante. Un error en la gestión de recursos o en la producción de componentes puede dejarte en una situación irrecuperable cerca del final del juego, obligándote a cargar una partida antigua y rehacer horas de progreso.
Sin embargo, esto también fortalece el mensaje del juego: cada elección importa. Nada se siente gratuito, y cada victoria, por pequeña que sea, parece ganada con esfuerzo real.
Conclusión: Una experiencia personal e inolvidable
The Alters no es solo un juego de supervivencia. Es una exploración emocional sobre identidad, arrepentimiento y propósito. Al enfrentarte a versiones de ti mismo, no solo sobrevives a un planeta hostil, sino que te enfrentas a tu propia historia.
Aunque sus sistemas de exploración pueden interrumpir el ritmo y la dificultad puede ser elevada, el núcleo emocional del juego —las decisiones morales y la gestión de tus alters— lo convierten en una experiencia profunda, desafiante y memorable. El juego está disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.
Puntuación final: 8/10
- Lo mejor:
- Narrativa introspectiva y bien escrita
- Actuaciones de voz que dan vida a los alters
- Gestión emocional y moral integrada al gameplay
- Sensación real de presión y toma de decisiones
- Lo que podría mejorar:
- Exploración superficialmente frustrante
- Minijuegos poco intuitivos
- Dificultad que puede castigar al jugador sin previo aviso
Un vistazo a los reconocimientos del juego.