Reseña para Jack Reacher: Never Go Back

Una de las películas que tomó a muchos por sorpresa fue Jack Reacher en el 2012 con Tom Cruise, obteniendo unos $218 millones en la taquilla. Así que siguiendo el patrón en Hollywood que si pegan una, lanzan 20 secuelas, nos llega está semana la segunda parte, Jack Reacher: Never Go Back.

Jack Reacher (Cruise) sigue trabajando por su cuenta, pero ayudando a los demás en su camino. Durante este proceso se mantiene en contacto con Susan Turner (Cobie Smulders de Avengers y How I Met Your Mother), quien es una oficial del ejercito y su persona contacto con la milicia. Un diá Jack decide ir a visitarla a Washington, DC pero se encuentra tremenda sorpresa al conocer que Turner ha sido arrestada por traición a los Estados Unidos, así que Jack decide probar su inocencia.

Personalmente me encantó la primera parte de Jack Reacher, ya que contaba una buena historia y uno se creía el personaje de Tom Cruise. Además de contar con la dirección de Edward Zwick, quien trabajó en las películas The Last Samurai, Glory y Legends of the Fall, mis expectativas eran bien altas. Bueno les indicó que está nueva propuesta se quedó corta a las expectativas y por mucho.

Primero es que la película utiliza todos los clichés de las películas de acción. A pesar que Smulders hace buen papel como la contraparte de Cruise, sus diálogos eran terrible. En especial cuando Reacher asume que él puede hacer mejor desempeño con Turner porque es hombre, ella explota mencionando que ha estado en el ejercito toda su vida y que ha tenido que lidiar con el machismo. Lo que sorprende es la manera que se lleva a cabo la escena. Aquí podemos notar que el libreto fue escrito por hombres ya que una mujer no se hubiera referido de esa manera.

Me alegro por Smulders por tener un rol protagónico, ya que me encanta como actriz, pero su papel no fue a la par de Cruise. A diferencia de Mission: Impossible – Rogue Nation que el papel de Rebecca Ferguson era igual que el de Cruise, acá intentaron pero no les quedó bien.

Cruise en la primera parte era un “bad ass,” que intimidaba a todos solo por estar en su presencia. Lamentablemente en la secuela no llega a ese rol. Si tiene peleas con 5 personas a la misma vez y él solo, saliendo airoso, aunque lastimado, pero no inspira este fenómeno que nos hicieron creer. Otras películas como John Wick y recientemente con The Accountant han podido llevar este tipo de personaje eficientemente a la pantalla grande. Definitivamente la magia se perdió.

La película comienza muy bien y sus primeros 10 minutos son muy buenos, pero luego se pierde la lógica y se convierte en otra película y termina en otra, inclusive en un “road trip.” Las escenas de acción son buenas, pero no son lo suficiente para mantener al espectador en el asiento. Así que los verá corriendo en pantalla en todo momento.

Está propuesta no llegó a las expectativas que esperaba, debido a lo mucho que me gusto la primera. Entiendo porque Tom Cruise tomó el rol de nuevo, ya que es una distinta experiencia que en las películas de Mission: Impossible, el cual pienso que si hacen una tercera película de Jack Reacher podría funcionar debido a que es tremendo personaje. Lamentablemente Jack Reacher: Never Go Back se quedó corta y como dice el título de la película, no regreses.