Reseña: Regresa James Bond con SPECTRE

Este noviembre llega SPECTRE, la nueva película de James Bond, y la que aparenta ser la última salida de Daniel Craig como el famoso 007. ¿Logra terminar su participación exitosamente? ¿O es SPECTRE la más floja película de la serie?

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El argumento es tan básico como tan enredado: James Bond (Daniel Craig) se encamina en una misión personal que lo llevará a encontrarse con SPECTRE, una organización global criminal. SPECTRE tiene un interés especial en el agente, y aparenta haber influenciado en muchos de los sucesos críticos de la vida de Bond. Mientras tanto en Londres, el nuevo M (Ralph Fiennes) está en peligro que la organización que dirige (MI-6, con su programa de Agentes 00) sea reemplazada por un sistema global de vigilancia electrónica impulsado por C (Andrew Scott).

LO QUE ME GUSTO

La cinematografía de la película es espectacular, y vale la pena verla en la pantalla grande nada más por experimentar los colores y sabores de los exóticos locales que visitan en la misma. Solamente con ver la primera escena, una complicada secuencia sin cortes en medio de una muchedumbre celebrando el Día de Los Muertos en Ciudad México, puedes confirmar el talento del director Sam Mendes detrás de la cámara.

Las escenas de acción son buenísimas y variadas, complementando momentos tan clásicos como la esperada persecución en el auto último modelo con elementos nuevos como una excitante pelea mano a mano dentro de un helicóptero sobre una multitud en una plaza. Las interpretaciones de los actores no son nada del otro mundo, pero logran su cometido. Los verdaderos fanáticos de la serie también disfrutaran de los momentos que la película le rinde homenaje a las entradas clásicas.

LO QUE NO ME GUSTO

Bueno, antes de hablar esto me gustaría hablarles de mi relación con la serie de Bond, para que quizás se entienda mejor porque tengo una respuesta tan negativa a SPECTRE. Desde que vi mi primera película de James Bond (Octopussy, alrededor del 86), me volví fanática de la serie, logrando ver todas las anteriores y esperando alegre las nuevas entradas en la serie. Disfrutaba de sus secuencias de acción, de los usos de lo aparatos de Q, de sus villanos arquetípicos y hasta de sus historias sin sentido. Mientras iba creciendo, comencé a notar algunas cosas problemáticas, como el trato de las mujeres en la serie, quienes servían exclusivamente como damiselas en apuros o como premio a Bond. A finales de los noventa, con la llegada de Judi Dench como M, la jefa de Bond, y de personajes como Wai Lin (Michelle Yeoh en Tomorrow Never Dies) me sentía que por lo menos estábamos progresando en ese sentido. Sin embargo, las historias cada vez más ridículas de la misma me hicieron perderle algo de cariño, hasta que finalmente llegó la serie de Jason Bourne para enseñarme que no teníamos que descuidar la historia para tener una excelente película de acción y espionaje.

Brincamos al 2006, con la llegada de Daniel Craig como Bond en Casino Royale (personalmente mi favorita). El Bond de Craig es un personaje del nuevo milenio, un Bond que no depende tanto de los aparatos electrónicos y más en su condición física y de su inteligencia. Es un Bond que puede ser implacable y hasta despiadado, pero que simultáneamente tiene momentos de vulnerabilidad, y quien puede ser encantador, jocoso, y amenazante en la misma escena. Quedé fascinada con este Bond 2.0, en especial por su complicada relación con M, la única figura de autoridad en su vida, y por su conexión con Vesper Lynd (Eva Green), quien más que una mujer más en la lista se convirtió en un verdadero amor. A pesar de que la siguiente, Quantum of Solace, no fue tan acertada, le aplaudí el hecho de que por primera vez la serie no hacia borrón y cuenta nueva, y los sucesos de la película anterior aún se sentían. Este nuevo aspecto regresó triunfalmente con Skyfall, que marcó el 50 aniversario de la serie con una historia muy personal y la participación del mejor villano que ha tenido la serie en sus 24 entradas, Silva (interpretado magistralmente por el actor español Javier Bardem). Skyfall fue la primera intervención de Sam Mendes (American Beauty) como director, y no solo demostró tener buen dominio de las secuencias de acción, sino que dejo claro que aun habían aspectos del personaje de Bond sin explorar, algo que no es fácil de hacer luego de más de 20 películas sobre el personaje. Cuando leí que Craig, Mendes y su equipo de escritores regresaban en SPECTRE, no podía contenerme la emoción, pensando que solo podían mejorar.

No se imaginan cuan desilusionada salí de SPECTRE.

SPECTRE da un paso bien atrás en cuestión de las caracterizaciones y la historia, reinterpretando los eventos críticos de las últimas tres películas (el juego de Le Chiffre, el sacrificio de Vesper, la conspiración de Mr. White, la venganza de Silva, la muerte de M) como eventos orquestados por SPECTRE, particularmente su líder Franz Oberhauser (Cristoph Waltz). La “revelación” de por qué Oberhauser le tiene tanto odio a Bond no solamente se ve de lejos (en los primeros minutos sale algo en escena que lo telegrafía a voces), sino que es una motivación tan estúpida que ensucia estos eventos tan cruciales de las pasadas películas. La lógica de la historia de SPECTRE y de las acciones de sus personajes solamente hace sentido si partes de la premisa que todos los que están envueltos no serían capaces de saber la contestación de 2 + 2 sin tener una súper computadora que haga el cálculo por ellos.

¿En serio que me trataron de vender que James Bond se olvidó de las cámaras que él vio que lo grababan durante una conversación crucial? ¿Acaso hace sentido que él deje inconsciente pero con vida al asesino que está cazando tanto a él como a la mujer que él prometió proteger? ¿Por qué los personajes insistían en tener conversaciones vitales en público y al aire libre cuando sabían que existía un sistema de vigilancia que los tenía en su mira?  Las estupideces no solamente son de parte de Bond y sus amigos. Con Oberhauser, alias Ernst Stavro Blofeld (¡HA! ¡HA! ¡HA!), Mendes  intenta traer al presente al icónico supervillano de películas como “Thunderball”, “You Only Live Twice” y “Diamonds Are Forever”, pero con sus estúpidos planes y su tonta motivación, Oberhauser termina pareciéndose más a su parodia, el Dr. Evil de Austin Powers. No culpo al Sr. Cristoph Waltz por esto, ya que con sus participaciones en Inglorious Bastards y Django Unchained ha demostrado que verdaderamente brilla con un buen material. No, la culpa cae 100% en los que trabajaron la historia y el libreto.

Pero la falta de inteligencia y lógica de la historia no es lo más que me molesto de la película.

LO QUE DETESTE

¿Cuál es en mi opinión el pecado más grande de SPECTRE? La completa inutilidad de los personajes femeninos.

Cuando primero escuche que Mónica Bellucci aparecería como “Bond Girl”, me emocione mucho, no solamente porque es una excelente actriz, sino porque sería la primera de las conquistas de Bond que es apropiada para su edad (Bond siempre envejece, pero sus conquistas no). Resulta que la participación de Bellucci no es nada más que un cameo glorificado. ¿A quién se le ocurre traer a Mónica Bellucci, probablemente una de las féminas más perfectas del planeta Tierra, para utilizarla literalmente en dos escenas donde Bond la (a) salva y (b) seduce, solo para olvidarse de ella por completo? A propósito, la mencionada “seducción” del personaje de Bellucci a sus comienzos parecía más una violación, convirtiendo lo que podía ser una escena muy sensual en una escena que me hizo sentirme muy incómoda.

Otra que no sale bien es Naomie Harris en su personaje de Moneypenny. En Skyfall, Moneypenny había demostrado ser una competente agente de campo, tan letal con un arma como Bond. ¿En SPECTRE? No es nada más que una secretaria, usada solamente para búsquedas de información pero inútil en el momento que los agentes de MI-6 tienen que cumplir con una pequeña misión.

Pero no hay peor personaje femenino en la película que el de Madeleine Swann (Léa Seydoux). Madeleine es el tipo de personaje donde los libretistas tienen que incluir diálogo donde otro personaje te deja saber cuan inteligente y hábil Madeleine es, porque fuera del dialogo la película no te da absolutamente ningún indicio de eso. Madeleine constantemente es utilizada como la damisela en apuros, cuyo único arco dramático es servir de motivación para las acciones de Bond. Ella está en peligro, él la rescata, ella cae de nuevo en peligro, él vuelve y la rescata, yada yada yada.  La película me intenta vender a Madeleine como especial para Bond, pero te da ZERO razones por las que debemos sentirnos invertidos en la relación.  En un momento comparten una cena romántica en un tren (un día después de ella decirle que no tenía ningún interés en él, como si existiera la posibilidad de decirle que NO a Bond), y es obvio que el cineasta desea dejarnos claro que la atracción entre Bond y Madeleine es profunda, más allá de lo físico. Sin embargo, mi mente no pudo más que compararla con la escena en el tren en Casino Royale donde Bond conoce a Vesper, quien no solamente acepta el perfil psicológico que Bond le hace con peculiar actitud, sino que sale ganando en su intelectual juego. ¿Cómo piensan venderme la idea de que Madeleine puede ser tan importante para Bond como lo fue Vesper?

En el momento en que Madeleine le dice a Bond que lo ama, no me pude aguantar y me termine riendo a carcajadas en el cine, porque es lo más ridículo que he visto en cualquier película de Bond (y estoy contando a Bond surfeando en un tsunami cuando digo eso). Como en el caso de Cristoph Waltz, la culpa de las fallas de este personaje caen en el libreto y no en la actriz, ya que con sus interpretaciones en “Blue is the Warmest Color” y “Sister” ha demostrado tener excelentes capacidades histriónicas.

En un año donde nos trajo personajes como Ilsa Faust en MI: Rogue Nation y Furiosa en Mad Max: Fury Road, el que todos los personajes femeninos en SPECTRE sean prácticamente inútiles solo resalta la actitud retrograda de la serie, en especial porque ninguna de las otras películas de Daniel Craig como Bond habían asumido esta actitud.

CONCLUSION

¿Significa esto que no disfrutaran de SPECTRE si la ven? No necesariamente. Como dije anteriormente, SPECTRE esta hermosamente filmada, y las secuencias de acción son verdaderamente buenas. Pero recomiendo que ajusten sus expectativas, ya que si esperan el nivel de calidad de las últimas entradas en la serie, probablemente terminen tan decepcionados como yo.

Ahora me disculpan mientras veo nuevamente Casino Royale para lavarme el mal sabor de boca.

Clasificación: PG-13